Continuar en movimiento
Antes de que rompa el día, con los pájaros y la luna
que sigue en pie, empieza el recorrido de hoy. Todo de nuevo, pero no todo
igual, porque entre la belleza y los misterios de la naturaleza siempre hay
sorpresas, algo reparador que sobrecoge y entusiasma.
Con la esencia del bosque, intenso, verde, nativo,
tuve una jornada más en la naturaleza, conectada con mi lado silvestre, el más
auténtico de todos. El entorno está lleno de belleza por acá, y seguramente por
muchas partes más, pero elijo disfrutar lo que está cerca, conocerlo, y aunque
añoro otros aires a veces, no puedo evitar el asombro con lo que tenemos
delante.
El camino cuesta arriba me fatiga, pero me encanta, así que me decido por inclinaciones pronunciadas en las que avanzo cada vez más rápido. Ha sido fantástico, otra vez.