Se acaba
Bueno, qué sí, que no va más, que ocurrió de todo, que este 2018 nos deja momentos memorables, muchos de risas e intensidad y algunos tranquilos y serenos, varios días con el viento a favor y otros más. En cualquier caso, de muchas emociones estuvo repleto este año. Cosas espeluznantes ocurrieron en el lugar del mundo que habitamos, pero dada mi incompatibilidad con el drama y mis pocas ganas de caer en desesperanza, mejor me ocupo de lo que me gustó y de lo que agradezco con creces; y para ambientar, dejo por acá algunas imágenes que cuentan algo de lo vivido y sentido en estos meses que llegan a su fin. En 2018 tuvimos la experiencia de descubrir nuevos lugares en familia y nos encantó. Entre la sorpresa y la emoción, comenzamos el año con unos fabulosos días en el sur del continente. Definitivamente, la fascinación por estar cerca de la naturaleza es invaluable. La calma que sentimos y las sensaciones frente a aquellos paisajes patagónicos se han convertido en i