Esto, aquello y lo demás también

Un finde contemplativo, muy relajado y tranquilo. Anticipamos la celebración del día del padre y con animo paseador partimos a un bonito lugar que mucho nos gusta.    Repetimos plan pero no fallamos. Llegamos en medio de una tibia mañana de cielo azul que aprovechamos para verdes y entretenidos recorridos, jugamos un tanto en el camino y quedamos listos para una jornada acuática que bastante disfrutamos... hasta que la lluvia llegó.  De la nada aparecieron fuertes y agresivas gotas que nos sacaron del agua de inmediato y suspendieron los planes al aire libre, no por mucho, claro. Después de un fascinante y terrorífico rayo, que con seguridad algo quemó, retornó la amabilidad del clima y de nuevo salimos a caminar. La tarde anduvo muy bien, con recorridos por los alrededores. Salvo la música con la que los lugareños dañan el ambiente, todo de maravilla. Hoy el día fue similar, con más sol mañanero! 

Momentos del finde que pasamos por los alrededores, intentamos picnic pero el clima no ayudó, igual, con frío y todo, dimos una vuelta antes de llegar a nuestro destino favorito. Un poco de naturaleza colorida y sonora para empezar el descanso sabatino.

Porque necesitábamos una jornada de baile y diversión, escogimos plan y sin mucho organizar, nos fuimos a disfrutar. El resultado, con todo y lo que en el ambiente encontramos y los sentidos percibieron, fue de lo mejor. De vez en cuando viene muy bien! En realidad el plan no fue para nada extraordinario, solo relajo, música y un par de copas, pequeños placeres suficientes para recargar energías o perderlas, con tanto baile... pero repetiremos, eso seguro!!