Mi sueño de anoche

Reconocí una casa que parecía la mía, mi refugio de siempre, pero no lo era. Una bruja anciana se acercaba, susurraba, no quería develar del todo sus secretos, pero me hablaba al oído, algo entendía, parece, pero la confusión reinaba.   Colores otoñales ambientaban y de una chimenea brotaban llamas intensas que querían más espacio.  

No es la primera vez que aparece el fuego en mis noches... no me gusta. No pasó nada, solo vi el entorno, sentí el ambiente helado aun con las llamas ardiendo, me atemorizó la anciana. Desperté, destapada, con frío.


 

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Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―