Sosiego, paz y tranquilidad


El finde, sin mayor plan, estuvimos relajados en nuestro rincón favorito.  Acompañados de Lila, extrañando a Tomy, preparando delicias al estilo Pancho y abrigados bajo el cálido sol sabanero, tuvimos un maravilloso domingo y un perfecto festivo.

En medio de una serena quietud, dedicados al reposo y disfrutando sobremesas alargadas, se acabaron dos días estupendos. Días que llenan el festín de bonitos recuerdos de nuestra pequeña familia y nos dan la fuerza y vitalidad necesaria para agradecer lo que nos ha tocado y seguir adelante con paso firme.








Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―