Manos a la obra
Domingo al horno.
Después de un día de mucha fiebre en el que estuvimos prácticamente horizontales, dedicados exclusivamente a evitar que la temperatura aumentara, tuvimos una jornada con más ánimo y de mejor salud.
Aun nos quedan regalillos pendientes y nada mejor que endulzarle la existencia a quienes nos ayudan a diario, así que con pocas intenciones de salir, organizamos en casa una "línea de producción" y preparamos ricos alfajores, que resultaron verdaderamente espectaculares... Fueron muy pocos, solo nos quedó la prueba.