Tantas cosas


Que septiembre llegue contento. Agosto terminó con un poco de todo. Unas semanas de ensueño y diversión con vacaciones cálidas y muy movidas, otras con agobios y más de una preocupación. No solo se trató de volver a trabajar, que aunque cuesta, hay que hacerlo y viene bien, no. Finalizamos mes con el peque en la clínica y asuntos del trabajo que algo de estrés causaron. 
La vida es como es. Está llena de momentos inigualables y especiales, y de otros preocupantes y aburridos por los que quisiéramos no tener que pasar.  Al final, lo importante será hacía que lado se incline la balanza, y bueno... No me puedo quejar.

Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―