Qué comience la Navidad

Esta vez tuvimos que celebrar velitas puertas adentro. Los virus buscan hospedaje y no lo queremos permitir, así que con la misma ilusión pero sin tanta emoción, prendimos nuestras luces en casa, en la chimenea, exactamente. Un plan diferente, bonito y sencillo para dar la bienvenida a la Navidad. 




 No se necesita tanto para pasar un buen rato, la imaginación del peque con las llamas, inventando cada locura alrededor, fue más que suficiente para una divertida noche.

Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―