Sintra

 Despliegue de energía. Tuvimos una larga, intensa y muy divertida caminata subiendo la sierra, o a un monte, uno del que no recuerdo el nombre. Íbamos camino del Palacio de Pena y nos desviamos al Castillo de los Moros, todo esto en medio de un cerro con bosque, empinado, muy verde. Muchos avisos indicando la ruta, pero al parecer no era la forma apropiada de llegar, ni la más rápida, ni la más cómoda. Fue desafiante y muy entretenida. Eso después de haber visitado con detenimiento la Quinta da Ragaleira que al joven le fascinó.  Pasamos un día genial en Sintra, nos lo caminamos todo, o una gran parte, nos reímos y almorzamos deli. 


Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―