Algunas de mis cosas favoritas

Mi yo muy feliz cuando…

Leo. Tener momentáneamente más de una vida, varias en simultánea, o asomarme a otras que también podrían ser la mía, me entretiene un montón. Sufro, me divierto, aprendo… todo pasando páginas, conociendo personajes. Vidas trágicas, historias espeluznantes, románticas, mucho amor, impulsos, la condición humana en historias que me emocionan, deprimen, fastidian, divierten...

Camino. Respiro y avanzo, veo lugares inalcanzables y llego a ellos con algo de esfuerzo. Trazo rutas que no sigo, improviso recorridos sorprendentes… Los pasos son mi terapia, mi forma de meditar, mi manera de despejar la mente y de mantenerme serena.

Paseo. Casi siempre me siento bien en medio de la sencillez, la tranquilidad y la contemplación rural, pero muy ocasionalmente me dan ganas de sentir la vitalidad y el frenetismo de la vida urbana. Me encanta conocer lugares… algunos intrigantes, otros exóticos, alguno por ahí salvaje, muchos tranquilos y otros sin ton ni son. Me fascina NYC. Me gusta ver la gente, hay de todo, un montón de caras desconocidas que hablan todos los idiomas me gusta el ritmo que se siente al salir del metro… dejar la oscuridad de la estación y encontrar de todo en las calles, y bueno, también en el subterráneo hay de todo, pero eso no me gusta tanto porque los roedores abundan. Hace años no voy.

Tomo fotos. Capturo imágenes, muchas, me emociona descubrir detalles, repasarlas después y encontrar novedades o recordar instantes. Ahora también me gustan los videos, las tomas en movimiento y las movidas, porque con frecuencia se desenfocan. Surgen comentarios inesperados, a veces, cuando comparto videos de los paisajes que veo en mis caminatas, y me divierte. Me apropio de imágenes que me impactan por su color, por su reflejo, por las emociones que me producen.

Escribo por acá. Sin preparación ni rigor alguno, dejo en esta página una secuencia de sucesos y soy feliz. Es simple. Son momentos en orden…de cada lugar y espacio. Algo sobre cómo vivo, qué y cómo miro, un poco sobre qué siento, con quién comparto, las personas que quiero, ilusiones... lo que imagino y también lo que invento. Vivo instantes fugaces y los alargó con una imagen. Los recuerdos se desvanecen, pero las palabras y las fotos ayudan a que perduren. Es mi forma de retener los días… hay mucho de observación y un poco menos de invención.   



Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―