Ahí lo dejo
¿Qué puedo decir de aquello? Que a veces no entendí el cúmulo de emociones, todas difíciles de clasificar, una tras otras, todas al azar. A veces parecía que todo se interrumpía abruptamente, hubo algunos silencios y en ocasiones reaparecía, una y otra vez, como una canción de esas que no se puede dejar de tararear.
Fue un mundo nuevo y desconocido. Pero todo seguirá girando. Todo se desvanecerá en el aire. Todo se disolverá lentamente hasta que sea poco más que un recuerdo indefinido. Todo permanecerá en los ecos del ayer.