Los días felices

Bajo un cielo gris, con un frío polar, sin compañía, así también la pasamos muy bien. Alegría serena, cocina humeante, pájaros cantando en medio de tantas flores y de una sabana selvática. Hace varias semanas que no podamos y con tanta lluvia todo floreció, está muy silvestre el ambiente, lleno de color.
Descansamos, dormimos profundos, hicimos siestas, comimos rico y sería todo. Se nos fue así junio, se nos fue  así un semestre ligero, fugaz pero amable. Con sus cosas claro, pero buenas casi todas... particularmente hablando por supuesto. Si me pongo a pensar un poco más allá es difícil que no falte fe en el futuro, parece que vamos en dirección contraria, retrocedemos como si nada.
Nos despedimos de la melena salvaje

Sucesos populares

Colectivo familiar

Sin rumbo fijo

―denota negación―