Mi peque ya no lo es tanto, ¡ahora tiene 5!

Alboroto y emoción antes de que llegaran sus invitados, juegos y diversión durante la celebración y agotamiento extremo al finalizar el día.  Valió la pena, el peque se divirtió un montón, pese a la tos que hizo entrada triunfal la semana pasada, pudimos disfrutar relajados y en muy buena compañía... tanto así que no importó que la piñata no hubiera durado ni un segundo en pie.
Mirada de Cinco












Entradas populares de este blog

Somos encuentro

Y un día ya puedes conducir

A un ritmo distinto