Domingo perruno
Una tarde feliz con visita canina y juegos por montón.
Las risas, las carreras, las conversaciones del altillo y los ladridos de Violeta, fueron las protagonistas de la tarde. Una jornada de risa va, risa viene, tanto así que los peques ni comieron con juicio, se dedicaron únicamente a disfrutar. ¡Qué bonito pasar los días así!
Quedaron rastros de heridas de guerra... jugar sin parar tiene consecuencias. Otra vez el ojo maltratado :( |