Burbujeante domingo

Si señores, la naturaleza nos regaló una cálida y luminosa mañana, perfecta para un domingo de celebración. Así sucedió...Instantes fabulosos de la vida en un día de mucho sol. Una bonita invitación que nos encantó y sorprendió... no por la invitación, pero sí por los talentos inexplorados de mi sist, ideales para brindar por la suerte que hemos tenido y la mamá que el universo nos ha regalado.
 

Con la mañana de hoy tenemos más recuerdos bonitos para la posteridad.  Un lindo lugar, delicioso menú y muy buena compañía. El peque se aventuró una vez más a pedalear, pero no fue el único, Simón no se quedó atrás, con escasos 3 años ya lleva ventaja y claro, también se unió el compañero de fórmula mayor... Nosotros, por el contrario, con la temperatura perfecta, en medio de la quietud, disfrutamos la jornada conversando sin parar... y bueno, con uno que otro salto por ahí, para que no digan!!







La jornada de bicicross fue por etapas, pero yo solo registré la primera, en el olvido quedará la embarrada del día, aquella que comienza a convertirse en rutina cuando visitamos la casa de los patos.


Me encanta celebrar este día, adoro ser mamá.  Desde que supe de la existencia de mi peque he sido inmensamente feliz, la vida no ha sido perfecta pero, sin lugar a dudas, ha sido absolutamente maravillosa, más y mejor de lo que pude imaginar.  Te amo infinito hijo. 

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Sin rumbo fijo

―denota negación―